Dudan de la
viabilidad de informar de las claves y direcciones públicas
30
de junio Fuente CincoDias
La propuesta del modelo 721 publicada el martes por el Ministerio
de Hacienda, y que obligará a presentar una declaración informativa a los
titulares, beneficiarios, autorizados y apoderados que operen con criptomonedas
en el extranjero, suscita dudas de calado entre los expertos. El documento, que
se encuentra en audiencia pública, establece que los afectados tendrán que
realizar la declaración con carácter anual entre el 1 de enero y el 31 de marzo
del ejercicio siguiente a aquel al que se refiera la información. A su vez,
delimita la localización de estos activos, entendiendo que están en el
extranjero cuando intermedia una empresa prestadora de servicios de custodia
situada fuera de España. todo correcto hasta ahí. A la hora de exigir
determinados datos, sin embargo, los expertos resaltan la falta de conocimiento
sobre este sector de quienes han redactado el texto.
Así lo pone
de manifiesto la obligación de informar sobre la “clave pública o dirección
pública, o, en su caso, claves públicas, vinculada a la moneda virtual objeto
de declaración”, según recoge el texto. Esta clave, añade el documento,
“identifica el monedero electrónico del declarante en el que se encuentra la
moneda virtual informada”. El problema, explica Emilio Pérez Pombo, asesor
fiscal y economista experto en la materia, es que esa clave pública que exige
Hacienda en el modelo 721 no existe para las monedas custodiadas, ya que el
proveedor de servicios no asigna al cliente por defecto una de estas
direcciones públicas. “Parece que al redactar el modelo han copiado y pegado
las exigencias relativas a los depósitos bancarios o cuentas corrientes. Y eso
en las criptomonedas no sirve”.