Las
aportaciones de las empresas a los planes de pensiones de los trabajadores
tendrán bonificaciones fiscales y reducciones de cotizaciones sociales. También
los empleados tendrán beneficios fiscales.
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de Julio Fuente Expansión
Hoy entra en
vigor la nueva ley de regulación de los planes y fondos de pensiones,
que aprobó el Parlamento el pasado día 20, tras el visto bueno del Senado. Con
la norma, el Gobierno trata de impulsar los planes de pensiones en las
empresas, como complemento a las prestaciones de la Seguridad
Social. Y lo hace con la pretensión de hacer posible el ahorro en las
pequeñas y medianas empresas, los sectores, y entre los trabajadores con
salarios medios y bajos; los empleados públicos y los autónomos.
Para ello, el
Gobierno ha regulado la tutela pública de la Seguridad Social de los fondos de
pensiones, con incentivos fiscales a los trabajadores y a las
empresas. Además, estas últimas tendrán descuentos en las cotizaciones sociales por
su aportación a los planes de pensiones de los trabajadores. El Gobierno quiere
que al final de la década -en 2030- el número de trabajadores con planes de
pensiones haya pasado de 3,5 a 10 millones, y el ahorro en los mismos desde los
35.000 a los 200.000 millones de euros.
La norma entra
hoy en vigor, salvo algunas disposiciones, que estarán vigentes a
partir del 1 de enero de 2023, como las siguientes: la reducción de
cotizaciones sociales de las empresas por sus aportaciones a los planes de
empleo. También, y precisamente, los controles que pueda hacer
la Tesorería de la Seguridad Social sobre las reducciones de cotizaciones
sociales y otras ventajas que puedan aplicarse las empresas por sus
aportaciones a los planes de pensiones de sus empleados. Información que,
también a partir del 1 de enero de 2023, deberán facilitar a la Seguridad
Social la promotora s de los planes de pensiones.
Con estos seis
meses de plazo hasta la entrada en vigor de estas medidas, el Gobierno quiere
dar tiempo a las empresas y a los sectores para preparar sus sistemas
informáticos, con la comunicación de las reducciones de cotizaciones sociales,
dado que toda gestión de cuotas con la Seguridad Social se hace de forma
telemática. En consecuencia, con la colaboración del Ministerio de
Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, las preguntas y respuestas más
importantes sobre la nueva ley de planes y fondos de pensiones son las
siguientes:
¿Qué son los
planes de pensiones de empleo?
Son unos
instrumentos de ahorro para la jubilación del trabajador, promovidos con las
empresas, mientras se mantiene el vínculo laboral. Son planes complementarios a
la futura pensión de la Seguridad Social, y se pueden deducir por parte de la
empresa el Impuesto de Sociedades, de las cotizaciones sociales, y del Impuesto
sobre la Renta, por parte del trabajador.
¿Cómo son las
ventajas fiscales y de Seguridad Social para las empresas?
Las empresas
podrán practicar en el Impuesto de Sociedades una deducción en la cuota íntegra
del 10% de sus contribuciones en los planes de pensiones de de los trabajadores
con retribuciones brutas anuales inferiores a 27.000 euros. Cuando sean
empleados con salarios brutos anuales, iguales o superiores a 27.000 euros, la
empresa aplicará la deducción sobre la parte proporcional correspondiente de la
cantidad ya citada. Además, en las cotizaciones sociales, las ventajas para las
empresas son las siguientes: las contribuciones empresariales a los planes de
pensiones de empleo podrán excluirse de la base de cotización a efectos del
pago de cuotas a la Seguridad Social, con un límite de 115 euros al mes por
empleado. Es decir, 1.380 euros al año. Esto supone un ahorro medio para la
compañía de casi 400 euros al año por trabajador.
¿Cuáles son
los incentivos fiscales para el trabajador que aporta a un plan de pensiones?
Los trabajadores
pueden llegar a deducirse del IRPF hasta 10.000 euros al año, con la contribución
de la empresa. En todo caso, como ha quedado dicho en el apartado anterior la
empresa se beneficia fiscalmente y en cotizaciones sociales de las aportaciones
al plan de pensiones del trabajador. Pero la cuantía de éste, aun con la
aportación de la empresa, pertenece al empleado, porque es salario diferido
que, fundamentalmente, se discute en la negociación colectiva.
¿Cuáles son
los incentivos fiscales para los autónomos?
Pueden deducirse
el ahorro en los planes de pensiones de hasta 4.250 euros al año. O también por
ser el promotor de planes de empleo en su empresa. Por ejemplo, el autónomo que
tiene una empresa con empleados o es directivo de una compañía con asalariados.
Son los autónomos conocidos como societarios. Además, estos pequeños y trabajadores
podrán participar en los planes de empleo promovidos por las asociaciones del
sector sin necesidad de que estén afiliadas a las mismas.
¿Por qué
quiere el Gobierno rebajar las comisiones de gestión de los planes de
pensiones?
Para abaratar el
producto, para que los salarios medios y bajos puedan acceder a los planes de
pensiones, igual que los autónomos y empleados públicos; para fomentar la
previsión complementaria en las pequeñas y medianas empresas.
¿Cómo se van
a rebajar las comisiones a los planes de pensiones?
El Gobierno
publicará un reglamento de desarrollo de la ley y establecerá, mediante
concurso, un tope de comisión para los fondos y planes de pensiones con tutela
de la Seguridad Social, aunque tengan gestión privada del sector financiero. En
todo caso, el Gobierno quiere bajar las comisiones de gestión por debajo del 1%
de los fondos gestionados. Incluso, hasta el 0,25%, teniendo en cuenta que la
Seguridad Social ha visto que las comisiones de gestión de los planes
individuales en el sector privado son elevadas, en torno al 1,04%. La rebaja de
las comisiones de gestión favorecerá especialmente a los colectivos ya
mencionados: autónomos, trabajadores con salarios medios y bajos, así como a
empleados públicos con el mismo rango retributivo.
¿Cómo se
gestionarán los fondos y planes de pensiones?
Con la Comisión
Promotora y de Seguimiento de los fondos y planes de empleo, formada por el
Gobierno. Y, en segundo lugar, con la Comisión de Control Especial de cada
fondo, en la que si estarán la patronal y los sindicatos.
¿Qué es la
Comisión Promotora y de Seguimiento de los fondos y planes?
Es la máxima
autoridad en la gestión de los fondos de pensiones y está formada por el
Gobierno. Le corresponderá la selección de entidades gestoras y depositarias, tras
los concursos, el control de la estrategia de inversión a largo plazo de los
fondos, la constitución de los mismos y el nombramiento de los miembros de la
Comisión de Control Especial. Estará integrada por nueve funcionarios de
carrera, de los ministerios de Seguridad Social, Hacienda, Asuntos Económicos,
Trabajo y Transición Ecológica.
¿Qué es la
Comisión de Control Especial del Fondo?
Es la comisión
que se encargará de la representación y gestión de cada fondo. Por lo tanto, de
la elaboración de la política de inversión de los recursos, el control y la
observancia del cumplimiento de las normas del fondo, el examen de la actuación
de la gestora y la supervisión de esta y, en su caso, de la decisión sobre su
sustitución. Estará integrada por trece personas: cinco serán elegidas por el
Gobierno, cuatro, por las organizaciones empresariales, igual que los
representantes de los sindicatos. Eso sí, los miembros de la comisión deben
poseer al menos cinco años de experiencia profesional en la gestión de los
fondos y planes de pensiones. O en otras actividades relacionadas con los
mismos que garanticen el conocimiento suficiente y la capacidad de supervisión
y gestión de los fondos. Además, no podrán incurrir en incompatibilidades ni en
situaciones de conflictos de interés. En el desempeño de su función los
miembros de la comisión actuarán con plena independencia, en defensa de los
intereses de las personas partícipes y beneficiarias. Las comisiones observarán
también el principio de representación equilibrada entre ambos sexos. Al menos,
debe haber una representación mínima del 40% de cualquiera de los dos géneros,
entre los hombres y las mujeres.