a inflación
interanual adelantada de la zona euro cae 1,6 puntos en marzo respecto febrero,
pasando del 8,5% al 6,9% en gran medida por la caída comparativa de los
precios de la energía, aunque la inflación subyacente sube una décima más hasta el 7,5%
31
de marzo Expansión
La moderación
del IPC comunitario responde sobre todo al comportamiento de los precios de la
energía, la partida con más peso en la evolución de este índice macro, que pesa
menos como elemento desestabilizador del índice general en este mes de marzo en
comparación con la abrupta alza que experimentó en marzo del año pasado tras la
invasión de Ucrania por parte de Rusia. La inflación en los veinte países que
comparten el euro acumula ya cinco meses seguidos a la baja desde el pico del
10,6 % alcanzado en octubre del pasado año.
No
obstante, los precios de los alimentos siguen al alza, más del
doble que la inflación general, y también la inflación subyacente,
que experimenta un nuevo, aunque pequeño repunte.
La energía pasó
de un avance del 13,7% en febrero a una tasa negativa de -0,9% en marzo,
consolidando la tendencia de la caída de precios de los productos energéticos,
cuya inflación interanual en la eurozona se situó en el 41,5% el pasado octubre,
en el 34,9% en noviembre, del 25% en diciembre, del 18,9% en enero. Los precios
de los bienes industriales, dejando fuera la energía, caen dos
décimas en marzo, hasta el 6,6%, mientras que los servicios se encarecieron un
5%, dos décimas más que en febrero.
La tasa
interanual de la inflación subyacente, dejando fuera la evolución más volátil
de la energía, los alimentos no elaborados, el alcohol y el tabaco se situó en
el 5,7% en marzo, frente al 5,6% de febrero. Si se excluye del cálculo el
impacto de la energía y los alimentos, la tasa de inflación subyacente se eleva
al 7,5% desde el 7,4% de febrero.
Loa alimentos se
encarecieron cuatro décimas hasta el 15,4%, según los datos preliminares de la
evolución del índice de precios al consumo de los países del club del euro
publicados hoy por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.
Por
países, España registró la segunda inflación más baja de
la zona euro con un 3,1%, por detrás de Luxemburgo, donde los
precios se encarecieron un 3% en marzo. También se situaron por debajo de la
media de la eurozona Bélgica (4,9%), Grecia (5,4%), Francia (6,6%), Chipre
(6%), Países Bajos (4,5%) y Finlandia (6,8%).
Por encima del
promedio se situaron Irlanda (7%), Malta (7%), Alemania (7,8%), Portugal (8%),
Italia (8,2%), Austria (9,2%), Eslovenia (10,4%), Croacia (10,5%), Eslovaquia
(14,8%), Lituania (15,2 %), Estonia (15,6%) y Letonia (17,3%).
El IPC de los
países del euro sigue lejos del 2% que el Banco Central Europeo (BCE)
tiene como objetivo a medio plazo. La institución liderada por
Christine Lagarde ha aprobado sucesivas subidas de los tipos de interés para
tratar de reconducir el encarecimiento de los precios, pero considera que
todavía no ha tenido efectos sobre la economía. En este sentido resulta especialmente preocupante el nuevo alza, aunque leve, de la
subyacente.