Los Presupuestos de 2023 incluyen una inyección adicional de hasta 1.600 millones al Fisco en el marco del despliegue de los nuevos impuestos, más controles y el plan anticrisis.

1 de marzo Expansión

El Gobierno ha rearmado a la Agencia Tributaria con un volumen de recursos inédito a fin de paliar la sobrecarga de trabajo que le supone la extensión del paquete de medidas anticrisis y de sufragar el ambicioso plan de control tributario para 2023, que pasa por desplegar la vigilancia sobre los nuevos impuestos a banca, energéticas y fortunas, o por reforzar las presencia inspectora en las calles y las redes.

En concreto, los Presupuestos Generales del Estado para 2023 duplican la liquidez inyectada al Fisco, gracias a una enmienda discretamente introducida por el grupo socialista durante la tramitación de las cuentas públicas.

"La actividad de la Agencia Tributaria se ha intensificado en los últimos tiempos pues, además de desarrollar las actuaciones propias para la consecución de sus objetivos, le corresponde en buena medida la tramitación de las ayudas y medidas de carácter social que aprueba el Gobierno en el contexto económico actual", rezaba la justificación de la enmienda socialista en relación con las medidas aprobadas tras la invasión rusa sobre Ucrania.

Por consiguiente, añadía, "es necesario que la insuficiencia del Presupuesto aprobado por las Cortes Generales se corrija lo antes posible en el tiempo, al objeto de que ese déficit de financiación no influya negativamente en el desarrollo de la actividad de la Agencia Tributaria", que este año asume además la gestión de tres nuevos impuestos, por lo que introducía una mayor dotación de fondos.

Tradicionalmente, el Presupuesto de la Agencia Tributaria se compone de una dotación inicial (ver despiece) que luego se ve mejorada mediante la generación de créditos a cuenta de sus actuaciones del ejercicio anterior. Es esta segunda palanca la que los socialistas han utilizado para reforzar al Fisco.

Inicialmente, el proyecto presupuestario del Gobierno establecía que "la recaudación derivada de los actos de liquidación y gestión recaudatoria o de otros actos administrativos acordados o dictados por la Agencia Estatal de Administración Tributaria, aplicada al Presupuesto de Ingresos del Estado en el mes de diciembre de 2022 podrá generar crédito en el mismo concepto, o equivalente, del Presupuesto del Estado para 2023" por un "5%", siempre que así lo autorice la "titular del Ministerio de Hacienda y Función Pública", María Jesús Montero.

Es decir, que como ya se había establecido en años anteriores, el Presupuesto permitía a la Agencia Tributaria generar créditos por valor del 5% de la recaudación del mes de diciembre previo.

Sin embargo, la enmienda socialista añadida al texto final de las cuentas públicas para 2023 durante la tramitación alteraba dicha redacción para establecer que los créditos a generar podrán ascender al 5% de "los meses de noviembre y diciembre".

El cambio es de gran relevancia puesto que, si normalmente añadir un mes ya supondría duplicar la capacidad de generación de crédito a cuenta de la recaudación del año anterior, 2022 ha sido un año de ingresos récord. Hacienda prevé que el ejercicio se salde con un 15% más de recaudación, alcanzando los 254.000 millones de euros.

Así, la recaudación tributaria del pasado noviembre fue de 16.094 millones, siendo de esperar que el mes de diciembre -del que aún no hay datos oficiales- arrojase al menos una cota similar.

Aunque no todos los conceptos brutos permiten la generación de crédito, un cálculo aproximado permite estimar que la Agencia Tributaria tiene a disposición una inyección de liquidez de unos 1.600 millones gracias a esta enmienda, el doble de lo que habría recibido con la redacción original del Presupuesto.

Fuentes oficiales explican que el objetivo de la medida es dar certeza y seguridad a las actuaciones de la Agencia Tributaria, que solo con el Presupuesto inicial no tiene caja suficiente ni para costear las nóminas de su personal, y que con esta fórmula cuenta desde inicios de año con una mayor liquidez ligada al resultado de sus actuaciones.

La promesa de nuevos recursos ya fue trasladada por el secretario de Estado de Hacienda y exdirector de la Agencia Tributaria, Jesús Gascón, a los Inspectores de Hacienda del Estado (IHE) durante su Congreso anual, celebrado el pasado octubre en Granada, donde reconoció la creciente carga de trabajo absorbida por el colectivo.

Después de todo, la Agencia Tributaria ha sido la encargada de gestionar y controlar la bonificación de 20 céntimos por litro de carburante que se ofreció de forma universal durante 2022 y que se constriñe ahora a profesionales como los transportistas, o de gestionar las rebajas fiscales sobre luz, gas y alimentos.

A su vez, la nueva directora de la Agencia Tributaria, Soledad Fernández Doctor, ya adelantó que el organismo tendría que hacerse cargo de la gestión y comprobación de los nuevos impuestos a banca, firmas energéticas y grandes fortunas. En paralelo, el plan anual de control tributario publicado este lunes prevé reforzar la presencia inspectora en las calles, para prevenir fraude en sectores de riesgo como el de la construcción y rehabilitación de viviendas, o en las redes, donde crece el cerco a las criptomonedas.

UN 15% MÁS DE PRESUPUESTO INICIAL, HASTA LOS 1.400 MILLONES, MÁS LOS CRÉDITOS EXTRA

El presupuesto inicial de la Agencia Tributaria que figura en los Presupuestos Generales del Estado para 2023 asciende a 1.396,57 millones de euros, lo que supone un incremento del 15,19% respecto a la dotación original prevista en las cuentas públicas de 2022.

En paralelo a esta inyección de fondos públicos por parte del Ministerio de Hacienda y Función Pública, desde la ley de su creación la Agencia Tributaria cuenta adicionalmente con un mecanismo de generación de crédito, a partir de la aplicación de un porcentaje -fijado en la ley de Presupuestos de cada año- sobre la recaudación derivada de sus actos de liquidación y gestión recaudatoria, entre otros.

Este año, como el anterior, esa cifra es del 5%. "La generación de crédito potencial que pensamos obtener en 2023 puede ascender alrededor de los 600 millones de euros", reveló la directora de la Agencia Tributaria, Soledad Fernández Doctor, en su comparecencia ante el Congreso de los Diputados antes de que el Presupuesto fuera enmendado duplicando la capacidad de generación de crédito a cuenta de noviembre de 2022 además de diciembre.

"Con este importe de generación de crédito, estimamos que serán necesarios para atender todas nuestras necesidades de 2023 alrededor de 358 millones de euros, poco más o menos", calculó entonces Fernández, explicando que el presupuesto final de la Agencia, una vez sumados los créditos a la dotación inicial, podría ascender a 1.785 millones de euros, lo que supondría un 7,8% más que el Presupuesto final de 2022, reveló.

La Agencia cuenta ahora, sin embargo, con un amplio margen adicional para generar crédito extra si lo considera necesario para atender sus obligaciones.