La recaudación crece un 5,5% hasta abril por el
alza de precios y salarios o el endurecimiento de Sociedades, que eleva las
bases imponibles de las empresas en unos 4.000 millones.
1
de junio Expansión
La recaudación tributaria ha mantenido su vigor en
el primer cuatrimestre del año,
en un entorno marcado por el alza de precios y salarios, pero también por el
endurecimiento en la aplicación del Impuesto de Sociedades, compensando con
creces la rebaja transitoria de impuestos impulsada por el Gobierno. En
concreto, la reducción de las retenciones de IRPF articulada sobre ingresos de
hasta 35.200 euros que Hacienda aprobó para adecuar su rebaja fiscal a rentas
de hasta 21.000 euros ha ahorrado temporalmente 215 millones de euros a los
españoles.
El Ministerio de Hacienda aseguró que la medida, que propicia un incremento de las nóminas
durante el año de las elecciones autonómicas, municipales y generales, se
aprobó para suavizar el efecto de los errores de salto que existen en la
progresividad del IRPF. Conviene recordar, en todo caso, que el efecto es
puramente temporal, pues la rebaja de las retenciones mensuales que las
empresas aplican en la nómina se compensará a favor de Hacienda cuando los
contribuyentes liquiden el IRPF de 2023 en la Campaña de la Renta de 2024, con
más declaraciones con resultado a pagar al Fisco.
Los asalariados de pymes y los pensionistas son
los colectivos más beneficiados por la rebaja transitoria.
Alza de ingresos del 5,5%
En paralelo, en todo caso, la recaudación
tributaria creció un 10,8% en abril -uno de los meses más importantes del año
por las declaraciones de IVA y el primer pago a cuenta de Sociedades- frente al
mismo mes de 2022, y acumula un incremento del 5,5% en los cuatro primeros
meses del año (6,2% en términos homogéneos). La Agencia Tributaria achaca la
evolución a tres factores principales: un repunte del IVA y un "intenso
crecimiento" del 11,1% en las retenciones de IRPF, en un marco de alzas
salariales (3,14% por convenio en abril, de media) y precios (con el IPC en el
3,2% y la subyacente en el 6,1%), de una parte, y los cambios impositivos en
Sociedades, de otra. En este punto, Hacienda recuerda que los pagos
fraccionados han crecido un 24,5%, "especialmente en los grupos, en parte
por el cambio en la forma de compensar las pérdidas de las empresas
pertenecientes a los mismos". "Con esta medida en el ejercicio 2023
la base imponible del grupo fiscal se determina sumando las bases imponibles
positivas y el 50% de las bases imponibles negativas individuales de las
entidades integrantes del grupo" y el resto "se irán integrando en
esta durante los diez años siguientes", explica la Agencia Tributaria,
apuntando a un alza de bases imponibles afloradas de 3.950 millones (aunque
solo aumentaron pagos por 1.240 de estos millones).
En conjunto, los ingresos del Estado crecieron un 10,7% hasta abril y los gastos, un
3%, rebajando un 76,5% el déficit frente a 2022 hasta el 0,12% del PIB (el agujero
fiscal del conjunto de administraciones, excepto municipales, fue del 0,18
hasta marzo).