En marzo se
firmaron en Euskadi 8.875 contratos indefinidos, lo que supone un 13,2% del
total, la tasa más alta lograda en décadas
Este marzo, con
el mercado laboral aún afectado por la crisis del
Covid, se firmaron en Euskadi 8.875 contratos indefinidos, lo
que supone un 13,2% del total, la tasa más alta lograda en décadas.
El hito se debió
a que en el mes se convirtieron de temporales a fijos 4.825 contratos,
una cifra sin precedentes que se puede atribuir casi por completo al éxito de
la 'herramienta de lucha contra el fraude' de la Inspección de Trabajo del
ministerio. Esta 'máquina', que utiliza la última tecnología en big data e
inteligencia artifical, sacó un listado de empresas de toda España sospechosas
de abuso en la temporalidad y en febrero se les enviaron cartas para que
regularizaran la situación de sus trabajadores. El resultado ha sido
espectacular por lo que se observa en el País Vasco: el 71% de los contratos
bajo el foco fueron transformados.
Los datos para
Euskadi los aporta la viceconsejera de Trabajo, Elena Pérez Barredo,
que destaca el aumento de eficacia que supone esta herramienta. «Llevamos años
trabajando con ella y se va perfeccionando día a día. Lo importante es la
mejora que se ha logrado a largo plazo, más allá del resultado obtenido con la
remesa de cartas de febrero», señala. Ese mes se remitieron 2.551 misivas en
Euskadi a otras tantas empresas, que afectaban a un total de 6.199 contratos
eventuales. Tras recibirlas y saber que estaban bajo el foco de la Inspección,
las empresas procedieron a regularizar la situación de 4.408 trabajadores.
Esta última
campaña ayuda a entender cómo funciona la herramienta. Se le introduce un
patrón para buscar posibles empresas en fraude. En este caso el objetivo fueron
aquellas con contratos temporales que superasen el periodo legalmente
establecido; esto es, 12 meses en un periodo de referencia de 18 o lo
establecido en el convenio colectivo de aplicación. Tras cruzar datos de la
Seguridad Social y de Hacienda, saca un listado de las compañías con indicios
de fraude y los contratos sospechosos.
«Se les da un
mes para que regularicen su situación de forma voluntaria. Muchas empresas
llaman alarmadas. Luego nos llega un nuevo listado con aquellas que no han
hecho nada y los inspectores las visitan para comprobar si hay fraude», explica
Pérez Barredo. Destaca que el uso de esa herramienta es un buen ejemplo de la
colaboración que existe con el ministerio, a pesar de que justo una parte
importante de la Inspección está transferida. «En el Gobierno vasco
apostamos por esa cooperación. Ellos controlan la herramienta y mandan las
cartas. Nosotros entramos en la fase posterior», precisa, para destacar
también el gran refuerzo que supone la tecnología. «Vamos a tiro hecho y eso
ayuda mucho en la lucha contra el fraude en la contratación», dice.
Otra remesa
Ya ha habido
otras campañas similares en el pasado, pero el resultado de esta última no
tiene precedentes. De los 6.199 contratos supervisados, se han regularizado
4.408, es decir, un 71%. Habrá que ver si se repite el éxito con la remesa enviada
un mes más tarde, en marzo. En esa ocasión el patrón de fraude buscado fue algo
diferente: se centró en el encadenamiento de contratos temporales para una
misma persona que superen 12 meses en un periodo de 18. Se remitieron 918
misivas con el objeto de corregir 1.943 contratos. Es una campaña menos
voluminosa, pero aun así podría tener un gran impacto que se notaría en la
contratación de este abril.
En el conjunto
de España ha ocurrido lo mismo que en el País Vasco. Las conversiones de
temporales a fijos sumaron casi 112.000 en marzo, más del doble que la cifra de
febrero y otro récord. El secretario de Empleo, Joaquín Pérez Rey, lo atribuyó
a la eficacia de la herramienta antifraude. «La unidad se constituyó en 2015,
pero ha habido un proceso de mejora continuo. Se han reforzado los funcionarios
que la integran y los recursos técnicos», explican fuentes del departamento.
La viceconsejera
de Trabajo destaca que la herramienta ha ayudado a mejorar considerablemente la
eficacia de la Inspección, pero considera que también se necesitan otras
medidas como un cambio legislativo. Ahora justo se está debatiendo cómo
reducir la temporalidad en la revisión de la reforma laboral.
20.000
contratos corregidos en los últimos cuatro años
El éxito
obtenido en la campaña de cartas de febrero no tiene precedentes, pero ya hay
años de trabajo en esa misma línea con buenos resultados. En los últimos
cuatros ejercicios la Inspección ha obligado a regularizar 20.000 contratos en
Euskadi, un 30% de los 65.000 revisados.
El pasado
ejercicio, marcado por la pandemia, fue algo más flojo porque la Inspección
tuvo que concentrar recursos en la lucha contra el Covid. Se supervisaron 9.668
contratos, de los que 3.047 se corrigieron.
Según explica la
viceconsejera de Trabajo, Elena Pérez Barredo, la utilización de la herramienta
en la lucha contra el fraude en la contratación se intensificó con la llegada
de Magdalena Valerio al ministerio en 2018. Ese año se revisaron casi 18.000 contratos
y el 44% fue regularizado.