Aspira a
recuperar el nivel de recaudación tributaria previo al Covid este año y a batir
récord de recursos sumando un alza del 1,8% en las cotizaciones. Presupuesta ya
una prórroga de los ERTE más allá del 31 de mayo.
Las proyecciones
fiscales remitidas este viernes por el Gobierno a la Comisión Europea en el
Plan de Estabilidad se basan, en buena medida, en la previsión de que la
recuperación económica –un avance del PIB del 6,4% este año– mejorará con
fuerza los ingresos públicos mientras que el gasto contendrá su avance a medida
que la campaña de vacunación ponga coto a la emergencia sanitaria, económica y
social. El documento, de hecho, prevé un tímido incremento de la factura
mientras que apunta a la recuperación del nivel de recaudación prepandemia este
mismo año y a un récord histórico en el conjunto de ingresos públicos.
Del lado
tributario, el Ministerio de Hacienda, que dirige María Jesús Montero, dibuja
un alza de la recaudación del 7,6%, hasta los 275.243 millones de euros en
2021. La cifra se sitúa a un paso de los 277.483 millones de 2019, antes de que
el estallido de la pandemia diera paso a una pérdida tributaria del 8,8% hasta
los 255.809 millones en 2020.
La previsión
pasa por un incremento generalizado de la recaudación obtenida con todas las
figuras tributarias. En concreto, se espera que, gracias al repunte de la
demanda interna, el IRPF arroje 104.709 millones, un 5,9% más, tras resistir
2020 con un alza del 1,2% gracias a las subidas de pensiones, salarios públicos
y a los ERTE.
En el caso de
Sociedades, que el año pasado se desplomó un 33,2%, se confía en un avance del
13,9% hasta los 25.177 millones en 2021. El IVA, a su vez, dejaría 76.079
millones, un 7,8% más, tras ceder un 11,5% en 2020. Finalmente, los impuestos
especiales aportarían 21.491, un 4,6% más, tras caer un 12,1% el pasado
ejercicio.