8 JUL 2021
En línea con
la tendencia de la evolución de la economía hacia la sostenibilidad y la
digitalización y en consonancia con las directrices de los fondos Next
Generation de la Unión Europea, el Instituto de Crédito Oficial (ICO) "va
a financiar cada vez más proyectos sostenibles y digitales", según ha
anunciado hoy su presidente, José Carlos García de Quevedo.
El futuro de
la financiación de este organismo va a ser así cada vez más verde y
digital, como lo demuestran las subvenciones a fondo perdido para proyectos de
movilidad sostenible, los bonos verdes puestos ya en marcha o las ayudas que se
concederán a seis planes de digitalización, en los que la financiación tendrá
entre un 10% y un 15% de carácter no reembolsable. García de Quevedo, en su
intervención "El papel del ICO en la recuperación" organizada esta
mañana por el Consejo General de Economistas (CGE), ha anunciado también que,
en cuanto a la digitalización de las empresas españolas, la institución que
dirige "irá adaptando sus productos".
En cuanto al
momento presente, el presidente del ICO ha manifestado que "la
recuperación económica ya empieza a ser intensa, muchos sectores están
creciendo, facturando e ingresando con relativa normalidad, lo que permite
centrarse en los sectores más necesitados".
Sobre las líneas de liquidez e inversión puestas en marcha al llegar la
pandemia, García de Quevedo ha señalado que han supuesto "un éxito de la
colaboración público-privada sin precedentes". El 98% de las mismas se ha
focalizado en las pequeñas y medianas empresas y en los autónomos y ha primado
la financiación a largo plazo, ya que el 70% de los créditos solicitados tienen
una amortización entre cuatro y ocho años.
José Carlos García
de Quevedo ha destacado el papel que durante la pandemia está teniendo la
colaboración público-privada, que va a ser también intensa durante la
recuperación. En especial ha resaltado la interlocución con el sector
financiero, gracias a la cual se ha conseguido una capilaridad en todo el país.
Asimismo, el presidente del ICO considera "fundamental" la
colaboración de la institución con las organizaciones empresariales, cámaras de
comercio, asociaciones profesionales y sectoriales, varios departamentos
ministeriales y la Comisión Europea, cuyo marco de ayudas públicas aprobado en
2020 ha sido esencial, en su opinión.
También se ha
referido como un buen instrumento para reducir la presión financiera al
Real Decreto por el que se aprobó hace unos meses el Código de Buenas Prácticas
y ha destacado que el ICO es, igualmente, un importante "banco nacional de
promoción, con un saldo vivo a favor de las empresas de 21.500 millones de
euros".